Luz de Luna (6º parte)

La tercera fue una noche el recuerdo mas terrible que conservo, el mas infame de todos los dueños y el mas dulce recuerdo. Una vez más estaba a merced de las garras de Lorena, una vez mas estaba deambulando en un mar de pesadillas… pero extrañamente reconfortantes. Me hallaba observando la luna inmersa en un mar de sangre donde una voz sin forma susurraba palabras que no entendía.

Me desperté extrañamente descansado y despejado busque a Lorena con la mirada pero no la vi. Me sobresalte al principio, pero cuando oí los ruidos de cacharros de cocina me calme. Me levante y me dirigí a la cocina, allí estaba con un delantal y la cara manchada de harina con una sonrisa que desarmaría a cualquier hombre. Me indico que la ayudara a poner la mesa y presto a ello me dirigí. Entre bromas y carantoñas pusimos la mesa, Lorena mostro unas dotes de cocinera que jamás imagine. Entrecot poco hecho, sangrante como me gusta, con patatas y salsa de roquefort con hierbas. De postre saco un bizcocho recién horneado que olía a canela y naranja, pero que tenía un extraño sabor que no presagiaba nada bueno. Continuamos bebiendo vino; una, dos, tres… cuando perdí la cuenta el alcohol me desinhibió y comencé a dejarme llevar por la situación. Al principio Lorena aparento sorpresa, pero sonrió como si lo hubiera ensayado mil veces y luego aparentemente borracha se me insinuó. Aunque de movimientos torpes había algo casi felino en su caminar y sus ojos mostraban una lucidez inaudita. Cuando se me acerco a la distancia suficiente para notar su aliento en mi nuca me susurro cosas en el oído capaces de estremecer a cualquier hombre, era pura tentación envuelta en un suave manto de carne. No puede existir hombre sobre la tierra capaz de resistirse a semejante proposición, pero algo en mi al verla se compadeció.

Esa mujer me inspiro una lastima tan profunda como ardiente pasión despertaba con cada gesto. ¿Como había acabado reducida a ese estado? Ya no veía furia en sus ojos, no había cautela en sus movimientos ya no estaba Lorena… solo había un maniquí de carne que anhelaba la compañía de un cuerpo. En esas condiciones seria aprovecharme de ella, no había honor, no había amor… no se me entregaba Lorena, sino una carcasa vacía. Así que la cargue al hombro y la metí en la cama, cuando en vez de desvestirme la arrope por un momento volví a ver la furia que tanto me entusiasmo en un primer momento. “¡Maricon desagradecido! Como te atreves a rechazarme, imbécil…….” Me insulto de todas las formas concebibles y me golpeo con una fuerza irrisoria. Por un momento la sangre me pedía abofetear y poseer por la fuerza a esa patética criatura que me agredía, demostrarle que no acepto órdenes ni soy un pelele. Aunque me reprimí, no pude evitar sujetarla con fuerza hasta que mis yemas se volvieron blancas, sentí como la rabia me subía por la boca en forma de bilis. Postrada sobre la cama con las muñecas sujetas vi sus ojos y comprendí. Le di un beso en la frente y me disculpe reprimiendo para mis adentros una maldición, nunca conocí a nadie que interpretara mejor. Ella con una sonrisa fría y sin vida respondió “Que pena, te habrías divertido… como todos los demás. Ves al final sois todos iguales, solo perros”. Yo me quede perplejo sabia que fingía pero…“¡La madre que la pario! Me había emborrachado solo para nublarme la cabeza. ¡Había fingido sin miramientos solo para probarme que yo era igual que quien le hizo tanto daño! No, eso era demasiado obvio y allí había algo mas.” Me sentía extraño, la cabeza me daba vueltas y me sentía muy cansado… “¡Ese sabor extraño! Eran las mismas hierbas que me dio esta tarde para dormirme.” Tenia que llegar a casa, huir solo Dios sabia que podía pasar… me dirigí trastabillando hacia la puerta, tropecé con todo y me quede tendido en el suelo.

Como una marioneta sin hilos, como una estatua… solo podía ver y oír, jamás sentí tanto miedo. La oía acercarse mientras suplicaba piedad a dios, incluso rece porque vinieran a arrestarme mientras me sacaran de allí. Ella se acerco y me dio la vuelta, dejo un pesado maletín de cuero del que saco material quirúrgico y drogas varias. Ella sin apartar la mirada del maletín continuo con su monologo, solo dios sabe cuantas veces habrá hecho esto. “Tranquilízate por mas que lo intentes no podrás moverte, esas hierbas son un regalo de mi padre. Lo único útil que me dejo en esta vida, (con los ojos en blanco mirando a la nada) todavía recuerdo la primera vez, aquel pastelito de hierbas… como caí al suelo inerte pero consciente de todo… y como abuso de… total ya sabes la historia. (Con una sonrisa vacía y el dolor de una herida infectada) Nunca se lo conté antes de este momento a nadie, pero tu parecías distinto… parecías un ser humano. Y de hecho eres distinto y serás un sujeto muy útil en mi trabajo. Te he observado tienes un autocontrol inaudito, los otros no se contentaron con lesionar las fuentes de sus molestias. Los dejaron inválidos, los dejaron malheridos, los mataron… joder si uno mato hasta su propia familia. Luego en la noche de luna llena no necesitaba ni entregarme en cuanto llegaba el plenilunio se me abalanzaban sin dudarlo, varios incluso antes de infectarlos… eran unos cerdos miserables como tu. Pero tu no, tu eres distinto, todo un caballero (pego un chasquido con la lengua) bueno casi. Además esa resistencia tuya a mis drogas… ¡Resististe tres veces la dosis necesaria par tumbar a un hombre de tu tamaño! Aunque puede que solo sea por cuestiones botánicas. Veras, es lo malo de no usar fármacos que no es una ciencia exacta, pero tranquilo no te aburriré con detalles. Desde que aquella alimaña me mordió y me transmito esta enfermedad he estado dando vueltas por todos lados, en ningún hospital sabían tratarme. Una variedad nueva de rabia decían… semanas de vida… matasanos ineficaces no sabían una mierda. Es una lastima que te marches en la ignorancia, pero que sepas que es por una buena causa. (Suspiro y tras encogerse de hombros cogió una jeringuilla y la cargo de un líquido transparente) No me mires como un monstruo, es morfina no sentirás nada. Note el pinchazo, y vi como de repente su mirada cambio, la mascara de hielo desapareció, volví a ver la Lorena de anoche… los parpados caían y los sonidos parecían cubiertos de algodones. Solo pude, aunque seria más correcto decir que creí oír algo metálico caer al suelo y lo que pareció un sollozo.

La oscuridad cayó y solo dios sabe que suerte me espera.

La historia ya alcanza su fin, solo falta una parte y ahora incluso yo ni siquiera se como acabara esto. Lorena es el personaje mas complejo que jamas concevi, llena de taras mentales con cuatro personalidades distintas que luchan por el control de un solo cuerpo. Esperemos por el bien del protagonisata que gane la adecuada. Por cierto es mi imaginacion o ¿¿Este tio da pena de pringado que es?? Por dios es como un emo con brotes psicoticos.